viernes, 25 de noviembre de 2011


El termino de un ciclo, el fin de una era, el ocaso de una historia, el punto final de la oración... Por mas que queramos o no queramos todas las cosas han de llegar a su fin pero hay algunos procesos, algunas historias que terminan para comenzar cosas aun mucho mejores... La nostalgia y tristeza que acompaña al termino de una jornada también se transforma en el jubilo y en la esperanza de comenzar cosas nuevas al otro día. Cuando se acaban procesos largos, periodos de tu vida que duraron años y llegan a su fin lo mejor es sacar provecho reírse al acordar cada tontería pensar en los momentos de pesar con sabiduría y sacar de cada recuerdo pequeño la experiencia y lo aprendido... Terminar una historia del tipo que sea es difícil, es triste, es amargo, es nostálgico pero es necesario. No empezaríamos un nuevo proyecto sin haber terminado el anterior 

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